domingo, 28 de noviembre de 2010

Ana María Fagundo, poeta canaria de la isla y la ausencia

Cecilia Domínguez Luis (El País)

Tema: Cultura
Hablar de Ana María Fagundo es hacerlo de su afirmación en la existencia, de su constante afán por encontrarse a sí misma a través de la palabra y, a su vez indagar con ella en ese mundo en el que vive, en un tiempo, el suyo, que sabe de ausencias y regresos. Digo esto a unos meses de su muerte -el 13 de junio-, que a todos los que la conocíamos cogió por sorpresa, como todas las muertes, a pesar de que sabemos que tiene que acontecer un día u otro, y de la que yo me enteré tarde, a través de una amiga común.

Nació en Santa Cruz de Tenerife un 13 de marzo de 1938, mes al que dedica varios de sus poemas -cada cumpleaños, como un rito, como un conjuro a la vida-. En 1955 obtuvo el título de perito mercantil y tres años después, el de profesora. En 1958 recibe la beca Anne Simpson que le permite estudiar en la Universidad de Redlands (California), donde se graduó, en 1963, en las especialidades de Literatura Inglesa y Literatura Española. A partir de este año y hasta 1967, estudia en las Universidades de Illinois y Washington, obteniendo en esta última el doctorado en Literatura Comparada, con especialidad en Literatura Inglesa, Norteamericana y Española.

Hasta el año 2002, ejerce de catedrática de Literatura Española del siglo XX en la Universidad de California (campus de Riverside). Durante este periodo publica numerosos trabajos sobre literatura española, hispanoamericana y norteamericana y es además directora-fundadora de la revista de poesía, narrativa y ensayo Alaluz (1969-2001).

La ausencia de su isla natal, a la que regresa de vez en cuando, marca una impronta en su poesía, de tal manera que, junto a la celebración por la palabra que le ha sido concedida, aparece la nostalgia de una isla que se hace más presente en la distancia. Así, sus poemas se pueblan de paisajes donde el mar, la roca, los cardones, la vegetación de la isla, sus volcanes, aparecen en un intento de hacer presente, casi tangible, la isla, con una gran fuerza emotiva pero, al mismo tiempo, contenida y sobria y donde lo humano ocupa también un lugar preferente. Así afirma en su poema Mi decálogo: "2... Lo mío siempre ha sido / los niños, los ancianos, / los perros / las flores, las plantas, las montañas, / el mar y el cielo, / el ser, / la poética palabra".

Poeta trasterrada, como se calificaba ella misma, es en la lejanía donde mejor se apodera de la isla, con una visión particular que la hace fundirse en ella, ser mujer-isla que nace, en cada poema de ese mar que une y que separa y al que siempre vuelve porque sabe que volver a la isla es volver a sí misma.

Ahora, en esa definitiva ausencia, su voz resuena aún más fuerte y grave, afirmando que "no se muere aunque se muera / que no es polvo aunque sea polvo / esta voz que hoy dice: soy, / siento".

Hasta siempre, Ana María.

Ciencia deja sin gastar uno de cada tres euros del presupuesto para I+D. El recorte global para investigación será del 8,4% el año próximo

Alicia Rivera (El País)

Tema: Ciencia
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La I+D española no solo sufre los ajustes presupuestarios, sino que además tiene partidas sin utilizar. La ciencia y la tecnología, incluidas actividades civiles y militares, sufrirán el año próximo una reducción de la financiación de un 8,4% respecto a 2010, según el proyecto presupuestario, lo que se acumula al 5,5% de recorte de este año respecto a 2009. "Esto entierra definitivamente la etapa de crecimiento del gasto en I+D+i de la anterior legislatura", señala un análisis sobre la política de investigación realizado por CC OO a partir de datos oficiales.

España partió de un retraso en este ámbito respecto a los países más desarrollados, "atraso que se corrige muy lentamente y, al ritmo actual, la convergencia con Europa tardará aún muchos años", advierte el estudio. Igualmente se aleja el ansiado cambio del modelo productivo.

Pero las grandes cifras del presupuesto difuminan la situación real del gasto público en I+D: en 2009 sólo se utilizó el 79% de los 8.405 millones de euros (sin contar los organismos públicos de investigación y las agencias) aprobados para investigación en distintos departamentos, con lo que quedaron sin ejecutar 1.730 millones de euros, en su mayor parte préstamos dirigidos a las empresas, puesto que los científicos no pueden endeudarse. Especialmente baja fue la utilización de los fondos del Ministerio de Ciencia e Innovación que, en 2009, "dejó de ejecutar uno de cada tres euros de los que disponía, mientras que el nivel del Ministerio de Industria fue muy superior".

Los cinco departamentos con competencias de I+D+i muestran diferentes resultados de utilización de sus recursos en 2009: Ciencia e Innovación, 67%; Industria, 95%; Defensa, 98%; Sanidad, 81%, Educación, 90%. El bajo porcentaje del departamento que dirige Cristina Garmendia se debe, sobre todo, al gran peso del capítulo de préstamos, cuyo alto volumen ha servido para presentar datos absolutos de inversión elevada pese al recorte de ayudas directas. Dentro del mismo ministerio, los programas de subvenciones para la ciencia y los organismos de investigación rondaron una ejecución del 90% o mayor.

"Las cifras absolutas, tanto en 2009 como en las previsiones de 2010, suponen alcanzar los niveles más altos nunca registrados de volumen de créditos utilizados, pero la provisión ha sido superior a la demanda de empresas y comunidades autónomas", dijo un portavoz de Ciencia. "Nuestra decisión es ir sustituyendo las subvenciones por préstamos en el I+D empresarial". Hay que destacar que en el proyecto presupuestario para 2011, Ciencia e Innovación sufre un recorte notablemente inferior (casi el 4%) a la media de la caída global de I+D+i (8,4%). Será Industria el departamento que soportará el grueso -dos tercios- de la caída el año que viene.

El análisis de CC OO aporta una perspectiva de la evolución del esfuerzo gubernamental en I+D. Entre 2004 y 2008 se constató un avance muy notable, pero ya en 2009 se frenó, y en 2010 han llegado las fuertes reducciones, que se acentúan en las cuentas de 2011. Pero al desglosar las cifras de los años de vacas gordas emergen datos más moderados de la trayectoria seguida. Desde 2004 hasta ahora, el capítulo de préstamos ha aumentado un 127%, mientras que las ayudas directas a la investigación han crecido un 56%. En 2011, el 61% de los fondos de I+D+i son gastos financieros, pero su cuantía total cae el 9,6%.

- El empleo científico bajará un 6,2%.

Los Organismos Públicos de Investigación (OPI) dependientes del Ministerio de Ciencia e Innovación, perderán, con los presupuestos de 2011, un 6,2% de sus trabajadores, pasando de 4.716 en este año a 4.423 el próximo (excluido el CSIC), según el análisis de los expertos de Comisiones Obreras. Esta reducción se debe, sobre todo, a que no se cubren las plazas de quienes se van jubilando; y el descenso de personal afecta tanto a los funcionarios como a los trabajadores con contratos laborales fijos y, en menor medida, entre los laborales eventuales.

En el CSIC, el mayor organismo de investigación en España, con casi 140 institutos y centros, y más de 7.000 trabajadores, la situación se presenta dramática porque, con el proyecto presupuestario, solo se convocarán 100 plazas en 2011, pese a que la tasa de jubilación actualmente es alta.

El Ciemat pasará el año que viene de 1.161 trabajadores a 1.099, es decir, una disminución del 5,3%, que es algo inferior al 7,2% del Instituto de Salud Carlos III, que pasará de 1.113 a 1.033 en 2011.

Ante esta situación, Comisiones Obreras pide medidas efectivas para "la recuperación de las plazas amortizadas [en los organismos científicos], ya que la investigación es un sector prioritario", así como eliminar la precariedad temporal de los trabajadores e incentivar el crecimiento y rejuvenecimiento de las plantillas.

Entre 2009 y 2011, los fondos públicos dedicados a los OPI (excluyendo la autofinanciación del CSIC), cae de 1.242 millones de euros a 1.003 millones. "Por ahorrar menos de 240 millones anuales (el 10% de lo recaudado con el derogado Impuesto sobre Patrimonio) o una nimiedad comparado con los miles de millones despilfarrados con el Plan E y similares, el Gobierno está poniendo en serio peligro la continuidad de todos los OPI, condenándolos a la inactividad y obligando a que se despida o no se renueven los contratos y becas a cientos de trabajadores ligados a la investigación", advierte CC OO.

El Gobierno ayuda a tres autopistas con alzas de peajes

Lara Otero (El País)

Tema: Economía

Tres autopistas de peaje (una de ellas aún en construcción) se beneficiarán de precios más caros o más años de concesión para sufragar los sobrecostes de expropiación de los terrenos o las obras adicionales no previstas cuando les adjudicó la concesión el Ministerio de Fomento. El Consejo de Ministros aprobó ayer la modificación de las condiciones bajo las que realizó las concesiones de la R-2 (Madrid-Guadalajara), la AP-7 (Alicante-Cartagena) y la AP-46 (Málaga-Alto de las Pedrizas, aún no inaugurada).

En el caso de las dos primeras, se aplica lo dispuesto en los Presupuestos de 2010 para ayudar a las concesionarias a devolver los préstamos participativos que se les concederán para sufragar los sobrecostes de expropiaciones. En el caso de la R-2 (participada por Abertis, Acciona, Globalvía y ACS) se le amplía la concesión en 15 años, desde 2024 hasta 2039. Durante esos 15 años adicionales podrá incrementar el peaje en un 1,95% por encima del aumento anual ordinario, que se calcula en función de la inflación y el tráfico.

En el caso de la autopista Alicante-Cartagena (que se adjudicó en 1998 por 50 años a un grupo de empresas, entre ellas la constructora Ploder, ahora en concurso de acreedores) se le permite encarecer las tarifas un 1% adicional y acumulativo cada año a partir de 2013, hasta que termine de pagar el préstamo participativo.

- Créditos participativos.

Estas dos autopistas y la concesionaria de las radiales R-3 y R-5 han solicitado esos créditos por un valor conjunto de 331 millones. Como los Presupuestos de 2010 contemplaban solo 200 millones para esos préstamos, Fomento está tratando de rascar esos 131 de diferencia de otras partidas.

La autopista malagueña (adjudicada a Sacyr) no está incluida en las que pueden recibir préstamos participativos, pero sí en las que podrían acogerse a la cuenta de compensación que, a propuesta de CiU, se trató de introducir en los Presupuestos de 2011. Ese intento fracasó en el Congreso por el veto del PP, pero ahora se pretende incluir ese adelanto de hasta 80 millones mediante una enmienda del PSOE a la Ley Postal en el Senado. La modificación del contrato de la AP-46 consiste, según un portavoz de Fomento, en que se tendrá en cuenta el sobrecoste de la obra en la fijación de tarifas, aún pendiente.

Un candidato en una burbuja

Àngels Piñol (El País)

Tema: Elecciones

Ni una fábrica, ni un mercado ni un aula de la universidad. Mas ha logrado algo meritorio: pasar por la campaña sin apenas entrar en contacto con la ciudadanía salvo en reuniones sectoriales y que agrupaban básicamente a gente afín. La cúpula nacionalista ha visualizado estas jornadas al milímetro. Como un candidato protegido dentro de una burbuja, Mas ha evitado así sufrir ante las cámaras el menor aprieto y sorteado cualquier situación que se le pudiera escapar de las manos. Objetivo: riesgo cero. Y objetivo cumplido.

Tras la abrupta campaña de 2006, en la que se estrelló con la ocurrencia de prometer ante notario que no pactaría con el PP y ridiculizó en un vídeo al tripartito, Mas ha optado por una estrategia opuesta. En un símil futbolístico, si entonces jugó con cinco delanteros, ahora ha tirado del catenaccio. Su obsesión ha sido no incurrir en el menor fallo sorteando tanto "las pieles de plátano" de sus rivales (desde el caso Palau a insultos) ni las que le pudieran poner espontáneamente los electores. De hecho, la única escena en la que Mas tuvo un cierto encontronazo fue antes de la campaña cuando en una reunión de sus amigos de Facebook, junto a la plaza de Cataluña, un joven de Zaragoza y de izquierdas se coló entre los admiradores de Mas que buscaban retratarse con él y le pidió que explicara qué pensaba hacer con los jóvenes en paro. La situación acabó con cierta tensión. No se le ha vuelto a ver otra escena espontánea igual salvo ayer con un grupo de escolares que coincidieron con él en el monasterio de Sant Benet.

Quienes se han pateado la calle han sido sus escuderos: desde Oriol Pujol, con el puerta a puerta, a Felip Puig, repartiendo propaganda en los mercados mientras Mas, ejerciendo casi de futuro presidente, ha ido explicando su programa por sectores por la mañana y al mediodía en diversos foros y siempre en locales cerrados. No ha perdido tiempo en comidas: solo se ha sentado alrededor de una mesa con los médicos y los comerciantes. Y, por la noche, a hacer kilómetros: más de 2.200 desde el Pirineo al Delta para ofrecer mítines. Eso sí: a diario ha ofrecido ruedas de prensa.

Con la coartada de que en las arcas no habrá ni un euro, no ha prometido nada hasta el punto de que su propuesta estrella, la del concierto económico para Cataluña, está condicionada a que en 2012 PSOE o PP le necesiten. Solo con eso, los sondeos apuntan que mañana arrasa.

Rusia reconoce que Stalin ordenó la matanza de Katyn. El Parlamento pide perdón por el asesinato de oficiales polacos en 1940

Rodrigo Fernández (El País)

Tema: Historia
Han tenido que pasar 70 años para que Rusia reconozca oficialmente que fueron los dirigentes soviéticos, y específicamente Iósif Stalin, quienes ordenaron el fusilamiento de miles de polacos en el bosque de Katyn. Esta matanza, que ha venido enturbiando las relaciones ruso-polacas, fue perpetrada en la primavera de 1940 después de que, de acuerdo con el tratado Ribbentrop-Mólotov, la Unión Soviética ocupara Polonia oriental. Los prisioneros que los soviéticos tomaron en 1939 -la mayoría oficiales- fueron ejecutados por los oficiales del NKVD, la policía secreta.

Ahora la Cámara de Diputados rusa ha aprobado por amplia mayoría -solo los comunistas votaron en contra- una declaración especial en la que asumen la autoría soviética de la matanza y piden perdón por ella.

"Los materiales publicados, que durante muchos años estuvieron guardados en archivos secretos, muestran no solo la magnitud de esa terrible tragedia, sino también que el crimen de Katyn fue perpetrado por orden directa de Stalin y otros dirigentes soviéticos", se señala en la declaración parlamentaria.

Las sepulturas de los polacos fueron encontradas por las tropas alemanas después de que estas conquistaran Smolensk. A 14 kilómetros al oeste, en el bosque de Katyn, los nazis descubrieron los restos de más de 4.000 polacos, en su mayoría oficiales. Pero esta era una pequeña parte de los más de 20.000 militares apresados en Polonia y traídos a territorio soviético. El resto fue ejecutado en Kiev, Járkov, Jersón (Ucrania), Minsk (Bielorrusia) y en la cárcel de Kalinin (hoy Tver).

La propaganda soviética afirmó, después de la guerra, que habían sido los nazis los que habían fusilado a los polacos, versión que mantuvo su carácter de irrefutable hasta la desintegración de la URSS. Pero los archivos abiertos después de la caída del comunismo en Rusia mostraban que la matanza la había comenzado a preparar el NKVD en febrero de 1940 en el marco de una operación que tenía como fin eliminar a los prisioneros polacos.

El público pudo tener acceso a esta verdad solo a partir de abril de este año, cuando a iniciativa del presidente Dmitri Medvédev algunas copias electrónicas de documentos secretos sobre Katyn fueron colgadas en Internet.

Entre ellas figura una nota del verdugo Lavrenti Veria -jefe del NKVD- dirigida a Stalin, en la que proponía fusilar sumariamente a los polacos. La aprobación del dictador figura con lápiz azul. Los comunistas, sin embargo, se niegan a reconocer la veracidad de los documentos guardados en los archivos y afirman que se trata de falsificaciones hechas por "Goebbels y su equipo".

El documento aprobado ayer ha sido posible después de que tanto Medvédev como el primer ministro, Vladímir Putin, declararan que debía reconocerse que los culpables de aquella tragedia fueron los dirigentes soviéticos.

Taieb Fassi-Fihri: "Estamos en estado de guerra"

Tomás Bárbulo (El País)

Tema: Marruecos
El ministro de Asuntos Exteriores de Marruecos es el primer miembro del Gobierno de Mohamed VI que admite, implícitamente, que la policía marroquí ha podido torturar a saharauis tras el desmantelamiento del campamento de Agdaym Izik, a las afueras de El Aaiún. Taieb Fassi-Fihri recibió a EL PAÍS en su despacho oficial de Rabat el pasado jueves, unas horas después de que el Parlamento Europeo pidiera una investigación de la ONU sobre los sucesos.

Pregunta. ¿Aceptará su Gobierno la investigación?

Respuesta. La resolución del Parlamento Europeo es precipitada y parcial. Es precipitada porque habíamos convenido con la conferencia de presidentes que la resolución iba a ser adoptada en diciembre. Y es parcial porque no habla de la situación de los derechos humanos de todos los saharauis, incluidos los que están en territorio argelino [en los campamentos del Frente Polisario, en Tinduf].

P. ¿Acudirá usted al Parlamento Europeo el 1 de diciembre, como estaba previsto, para dar su versión de los sucesos?

R. Desde luego. Iré para demostrar el carácter parcial, injusto y desequilibrado de la resolución.

P. En esa comparecencia, ¿va a admitir que ha habido torturas y desapariciones de saharauis?

R. Quiero señalar que no hubo ningún muerto en el desmantelamiento del campamento y que los soldados marroquíes no han disparado ninguna bala, a pesar de que fuentes de Argelia, del Polisario y españolas afirmaron que se había perpetrado un genocidio y una limpieza étnica.

P. Repito: ¿Va usted a admitir que ha habido saharauis torturados en las comisarías y que hay desaparecidos?

R. Voy a demostrar la realidad política y judicial. Me refiero a personas que han cometido crímenes. Ahora, si usted dice que hay personas inocentes que han sido torturadas, eso lo dice usted. Yo no lo admito. Tampoco admito que haya habido desaparecidos.
P. Hay numerosos testimonios que atestiguan ambas cosas.

R. No ha habido torturas a inocentes.

P. ¿Y a culpables?

R. Si han sido o no torturados, eso lo dirá la justicia. No sé si usted tiene confianza en la justicia.

P. ¿Va a admitir que la policía dirigió grupos de colonos marroquíes para saquear las casas de los saharauis?

R. La policía ha hecho un esfuerzo enorme para impedir que la población civil reaccionara contra los [saharauis] causantes de los incidentes e hiciera su justicia. Algunos medios dijeron que había habido una intervención militar, que había decenas de muertos entre los civiles del campamento y que los asesinos habían sido las fuerzas del orden.

P. ¿Niega los testimonios de que la policía dirigió los saqueos a las propiedades saharauis?

R. El Estado ha hecho grandes esfuerzos para tranquilizar a los civiles.

P. Dice que los soldados que entraron en el campamento no usaron armas de fuego. Sin embargo, comienzan a conocerse testimonios de heridos de bala.

R. ¿En el campamento?

P. Sí.

R. Es mentira.

P. Yo he recogido uno de esos testimonios. Un saharaui con un balazo en un brazo.

R. No, lo niego.

P. ¿Se disparó después, durante los disturbios?

R. Tampoco. Se han dicho muchas mentiras a la opinión pública española, que está mal orientada cuando dice que la única salida al conflicto del Sáhara es un referéndum. Los creadores de opinión, algunas ONG, la orientan mal por razones históricas y estratégicas. Mire, desmantelamos el campamento por tres razones. La primera, durante semanas hubo oportunidad para negociar, pero luego tomamos conciencia de que allí había un grupo que no quería negociar. La segunda, las dos terceras partes del campamento eran tiendas vacías, que habían sido montadas con el fin de aparentar que la movilización era mayor. Y la tercera razón, hubo gentes a las que se le impidió salir del campamento; lo han declarado después.

P. No sé de nadie que haya declarado eso.

R. Sí, lo declararon tres mujeres. La opinión pública española ha sido engañada durante semanas, durante la operación de desalojo. Y ahora que todo el mundo sabe que ha sido engañada, solo quiere hablar de la violencia que hubo después del desalojo.

P. La ministra española de Exteriores, Trinidad Jiménez, se ha pronunciado en la cumbre de la OTAN de Lisboa a favor de que la Misión de Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental (Minurso) tenga competencias en materia de derechos humanos. ¿Está de acuerdo?

R. La prensa ha contado que eso se lo dijo la ministra a los ministros de EE UU y de Reino Unido. A mí no me lo ha dicho.

P. ¿Ustedes estarían de acuerdo en que la Minurso asumiera la vigilancia de los derechos humanos?

R. No, no y no.

P. ¿Por qué?

R. Esa es una estrategia de Argelia y del Polisario que ha calado en España. Gira en torno a dos ejes: [competencias de la Minurso] en derechos humanos y [prohibición de la] explotación de los recursos naturales del Sáhara. Es la estrategia que desarrollan, día tras día, desde 2007, con la movilización de algunos activistas que entran al territorio como turistas y tienen como instrucción desafiar la presencia marroquí. El objetivo de esta estrategia es evitar la negociación entre Marruecos y el Polisario. Es una maniobra de distracción de los servicios de inteligencia argelinos.

P. No aceptando la competencia de la Minurso en derechos humanos, dan ustedes a entender que tienen mucho que ocultar.

R. Nada de eso. La prueba es que Human Rights Watch está aquí, Amnistía Internacional está aquí... Hay en el mundo seis misiones de Naciones Unidas que carecen de competencias en materia de derechos humanos. No vamos a transigir en esa cuestión, que sirve a la agenda de nuestros adversarios. Porque estamos en un estado de guerra.

P. ¿Contra quién?

R. Estamos en un estado de guerra en su sentido global. Tenemos enemigos que atacan los supremos intereses del país.

P. ¿Se refiere a Argelia y al Polisario?

R. Puedo decir de manera clara que los cócteles molotov, el estallido de bombonas de gas y el degollamiento de un policía son obra de milicias que han estado en contacto permanente con el territorio argelino.

P. ¿Tiene pruebas de eso?

R. El Polisario ha dicho claramente que sabía lo que ocurría en el campamento de Agdaym Izik. Eso demuestra sus contactos.

P. El 13 de diciembre hay una reunión entre la Unión Europea y Marruecos para desarrollar el acuerdo de asociación. ¿Teme que los sucesos del Sáhara afecten a ese acuerdo?

R. No. Habrá un diálogo político sobre la cuestión del Sáhara, como siempre.

P. ¿Está satisfecho con la actitud del Gobierno español ante los sucesos del Sáhara?

R. No puede usted aislar la posición del Gobierno de España de la del resto de los Gobiernos europeos. Todos han pedido conocer y analizar los hechos antes de manifestarse. Pero, una vez más, la cuestión marroquí y la cuestión del Sáhara están en el centro de la política interior española.

P. ¿Su Gobierno respalda la declaración de los partidos políticos marroquíes contra el Partido Popular español?

R. Tomo nota de ella.

P. ¿Pero usted está de acuerdo con la afirmación de que el PP está utilizando la cuestión del Sáhara con fines electorales?

R. Sí. De esa manera ataca al Gobierno de Zapatero, que mantiene la misma posición que los demás Gobiernos occidentales.

P. Ustedes tienen prevista en diciembre una nueva reunión con el Polisario...

R. Con Argelia.

P. ¿Cuáles son sus líneas rojas en esa negociación?

R. El referéndum de autodeterminación es un mecanismo minoritario, porque ha sido aplicado en la descolonización de muy pocos países.

P. El Parlamento Europeo ha pedido la libre entrada de los medios de comunicación internacionales en El Aaiún. ¿Va usted a permitirla?

R. En el marco de la confianza, periodistas españoles nos han hecho mal, influyendo negativamente en la opinión pública española. Pero usted está aquí.

P. Estoy aquí, pero ¿puedo volver mañana a El Aaiún a seguir trabajando?

R. [El ministro pide que apague la grabadora para un off the record. Tras volver a encenderla, repito la pregunta].

P. ¿Puedo o no puedo volver a El Aaiún?

R. Ya le he respondido off the record.

P. Pero yo vuelvo a formularle la pregunta en abierto.

R. No voy a responder.

Julio Anguita: "Sin la República, no habrá solución a la crisis ni hoy ni mañana"

Juanma Romero (Público)

Tema: Política
El ex coordinador de IU y ex secretario general del PCE, ponente de la Conferencia Republicana que hoy celebra el PCE, defiende un nuevo "proceso constituyente".

Es un “antisistema”. Un dirigente “clásico” que ama la palabra y desdeña el “maridaje perverso de política y medios de comunicación”, que reduce el debate al show, “a las candilejas”.

Julio Anguita González (Málaga, 1941), ex líder de Izquierda Unida (1989-2000) y del Partido Comunista de España (1988-1998), diserta sobre su “desencanto” de la política y sus ganas de cambiarla en torno a los posos de un café en la cervecería Cruz Verde de Córdoba, para luego trasladar la charla unos metros más allá, a su casa, a su estudio poblado de libros y frente a su ordenador. Cae la noche en la ciudad. Son las horas en las que concentra su trabajo, después de su sesión diaria en el gimnasio (hace natación), la compra, la partida de dominó, la siesta. Escribe artículos, participa en debates en televisión y prepara dos libros. Uno sobre IU. Otro sobre la Tercera República, el tema que le ha devuelto a la actualidad. El secretario general del PCE, José Luis Centella, le encargó que dirigiese la ponencia de la Conferencia Republicana. Lo hizo. Y hoy sábado se discutirá su texto en Madrid.

En estos años, Anguita apenas ha cambiado. Físicamente, sigue ágil. Y, como se ve en la segunda parte de esta entrevista, en su mensaje político emerge sin tapujos su teoría de las dos orillas, aquella con la que imprimió la línea de IU en los noventa, en plena debacle del socialismo y que, a la postre, llevaría a la federación a una terrible derrota en 1999 y en 2000 –ya con Francisco Frutos de candidato–, cuando cayó de 21 diputados a sólo ocho. Ahora se encuentra embarcado en su proyecto de República, la única valla que podría parar esta "obra sin sentido de la política actual, con las instituciones deshilachadas" y una sociedad "anómica". Hay que acabar con la "trinidad del capitalismo", insiste una y otra vez: el mercado, la competitividad y el crecimiento sostenido.

- Cuando usted y el líder del PCE presentaron el 4 de noviembre en Madrid la Conferencia Republicana, insistían en que ahora hay que hablar de República, “con la que está cayendo”. Justo con esta crisis, ¿cómo van a entender los ciudadanos que se hable de ella?

- En un primer impacto, con todos los problemas que hay, sí podría sonar extraño. Pero yo ya en la fiesta del PCE de septiembre de 1996 ya advertía de que la Constitución no se había cumplido. Y según ha pasado el tiempo, la ruptura es más clara. El partido ha visto que había que dar contenido a ese revival republicano: la memoria histórica, la búsqueda de alternativas, el recuerdo de la II República. ¿Por qué? La Transición se ha agotado víctima de sus fracasos, devino en lo que en principio fue, una Restauración borbónica, exactamente igual a cuando Antonio Cánovas, en 1874, propicia la vuelta de Alfonso XII. La Transición no fue más que la Restauración de la monarquía expulsada por segunda vez en España.

Hoy la Constitución suena a cachondeo. Ni los partidos se la creen. Hay que dar respuestas a lo que llamo crisis de civilización, que no es sólo económica y financiera, sino medioambiental, alimentaria, ética, política, total. Y sólo es posible si la ciudadanía participa en política a través de un proyecto que la implica. España necesita a millones de hombres y mujeres republicanos que asuman esa tarea de saneamiento político y moral de la sociedad, que ejerzan de ciudadanos, con derechos y deberes. Ahora, hemos vertebrado el mensaje republicano en dos ideas –la declaración de Derechos Humanos de la ONU y la Carta de la Tierra de 2000– y una pregunta: ¿la economía está dentro de la biosfera o a la inversa? La respuesta republicana es que está dentro de la biosfera y se tiene que supeditar a la defensa de los equilibrios del planeta y al interés general. La economía no puede proyectar una sociedad, no es una ciencia de fines, ha de obedecer los objetivos que le marque el colectivo. Es como cuando a un arquitecto le encargas una casa: él la hace, pero tú le dices por dónde ha de hacerla. Claro que lo que digo va en contra de lo que existe. Obviamente.

- ¿Es una revolución?

La palabra revolución no me da miedo. A la gente hay que explicarle que en España hemos hecho muchas revoluciones y no nos hemos dado cuenta: la libertad en la elección de pareja, las bodas homosexuales... Ahora hay que llegar a la madre de todas las revoluciones: la igualdad, y se ha de partir de la igualdad económica. No me interesa una República que no haga que la riqueza esté al alcance de todos y cumpla los derechos humanos. Luego está la cuestión del rey. Se merece críticas durísimas, pero es algo secundario. Si no tenemos en cuenta lo anterior, tendríamos una República coronada, y eso es lo mismo.

- Insisto, ¿la República es lo que necesita una España en crisis?

- La pregunta es sencilla. Ustedes, compatriotas, ¿creen que esto tiene solución? No, no la tiene en absoluto. Ni hoy, ni mañana, ni pasado. Esto es un proceso de decadencia sin solución. Es un problema de estructura. ¿Y cómo se llega a la República? ¿Podemos llegar a ella desde lo que tenemos, de una forma suave? No, no lo veo. Hablamos de un proceso constituyente...

- Pero la Constitución habla de un consenso previo, después la disolución de las Cortes, elecciones, un referéndum...

- ¿Quién dice que la Constitución tenga que permitir o no? ¡Si para mí es como si no existiera! El proceso ha de fluir de abajo arriba, donde la ciudadanía sea portadora y co-creadora del proyecto, que la gente sepa qué ejes contendrá esa futura Constitución que luego redactarán los diputados: los derechos humanos, la paz, la federalidad, la laicidad... Se trata de crear República. El general Prim decía, con la Revolución de 1868, que no había republicanos en España. Pues bien, éste es el momento de hacer republicanos, de hacerlos para esta concepción de República. Tenemos por delante casi la eternidad.

- ¿Cómo se construye ese proyecto sin pasar por las instituciones?

- Si se hace de abajo arriba, si se crea esa identidad, llegará un momento en el que aumentará el voto en blanco, o se exija un referéndum, o se actúe en los ayuntamientos. Acabará invalidándose la actual legislación.

- ¿Acaso existe ya esa ebullición?

- No, en absoluto. Por eso el PCE pretende ponerlo en marcha. Debe ser desde ya la actividad del partido, y no una más. Porque no descarto que en 15 ó 20 años nos hallásemos con una República conservadora, distinta a ésta...

- Luego su modelo sí es una República de izquierdas, aunque se nieguen a darle ese adjetivo.

- Desde la Revolución Francesa, la cosa está muy clara: la radicalidad democrática estuvo del lado de los jacobinos. La etapa thermidoriana [1794-1795] fue más conservadora. Nosotros planteamos una República democrática. Y democracia es igualdad, pleno empleo... ¿Eso es de izquierdas? No, es democracia consecuente. Si se hubiera aplicado íntegra la carta de Derechos Humanos, el mundo habría cambiado. Igual que la Constitución.

- ¿No excluyen a la derecha?

- Es el proyecto que objetivamente conviene a la mayoría, pero esto se resuelve votando. Pero no estoy de acuerdo con una República en la que una minoría la vacíe de contenido. Ésta es una condición sine qua non para nuestro proyecto. Por otro lado, ya la derecha ganó unos comicios en la II República [los de 1933]. Este país ya ha tenido demasiados consensos, y hay aspectos en los que es imposible un consenso. No vamos a repetir los vicios de la Transición.

- Quitar al rey, dice, es secundario. Inevitablemente, cuando uno piensa en República, piensa en la caída del monarca. ¿Cómo hacerla? Haría falta un consenso PSOE-PP...

- ¡No vamos por ahí, no entramos en ese camino! El mecanismo previsto en la Constitución no me interesa. Si se plantease llegar a la República por esa vía, sería un suicidio.

- ¿Cómo hacerlo entonces?

- Con un proceso de abajo arriba, el monarca cae. El rey Juan Carlos no es un dechado de perfecciones, aunque la prensa le haya protegido en exceso, culpablemente. No hablo de referéndum. Hablo de un proceso constituyente de la sociedad, totalmente al margen –no digo contra– del aparato del Estado. Pero República no es que en vez de rey haya un presidente. Para mí el concepto República está ligado a un contenido: igualdad social, democracia, ética, libertad, y eso es incompatible con la presencia de un soberano.

El antimonarquismo no es en sí republicano. Y decir que uno es republicano, pero juancarlista, es una estafa intelectual, producto de un miedo vergonzante. Si esto fuese un juego de ajedrez, no empezaría buscando el jaque al rey. Eso vendría después.

- Por tanto, ¿no hay modelo fuera en el que fijarse? Francia o Alemania son repúblicas, y ambas sufren crisis.

- En Francia hubo una revolución que nunca hubo aquí. Somos un país que nunca ha hecho las transformaciones, porque todos los cambios económicos y sociales los han promocionado las minorías. Se nos han regalado las libertades, no las hemos conquistado. Las dos repúblicas se las tuvieron que ver con los poderes fácticos de la España eterna: capitalismo, oligarquía e Iglesia. Ambas se vieron presas de una tenaza: la gente quería que se resolvieran de inmediato los problemas sociales que venían de la noche de los tiempos. Ambas eran débiles. Por eso el PCE se basa en las lecciones de la historia y promueve un proceso constituyente, para que la República debe ser querida, asumida y traída por los ciudadanos.

- ¿La influencia del movimiento de la memoria histórica ha sido positiva?

- Está abigarrado, atomizado. Está muy bien recordar la II República como referente, pero hay que hablar de una República para el siglo XXI, justo para que la sangre de los que murieron por la República tenga sentido. Ya está bien de nostalgias. Y ahora, discutamos qué República queremos. Yo propongo esta definición de democracia: un convenio permanente entre seres libres e iguales para convenir permanentemente.

- Para que esa sangre de los que murieron tenga sentido, ¿de qué errores de la II República hay que aprender hoy, en 2010?

- Muchas cosas. No subestimar al adversario, al Ejército, a la Iglesia, que hoy está en una relación fuera de toda ética política desde 1979, viviendo de los Presupuestos del Estado de forma indecorosa.

- No se marca un horizonte temporal, pero en la presentación de la Conferencia apuntaba que el proceso sería difícil y largo.

- Esto es un proceso en una pizarra, pero yo sé que la historia pega saltos, que cayó Grecia, cayó Irlanda y la situación del euro es muy difícil... No sé qué va a pasar, porque aquí la contestación social no tiene mucho que ver como la vista en Francia. Pero se está llegando a situaciones en la que gente tendrá que responder o hacer como los numantinos, matarse. ¿Hasta cuándo van a aguantar los ciudadanos?

- También comentó que no era el tiempo de echar la vista atrás. Pero, ¿fue un error que el PCE, liderado entonces por Santiago Carrillo, aceptase la Corona en 1977?

- No me gusta hacer suposiciones sobre situaciones que no viví directamente, porque yo era en aquellos años un dirigente provincial del partido. Pero, evidentemente, nos sorprendió mucho esa decisión de que el PCE aceptara la Corona. Sin embargo, una vez que se rompió la unidad de la izquierda –y no la provocó el PCE–, todos los partidos actuaron con oportunismo, al grito de sálvese quien pueda. El PSOE, cuando le legalizaron, no puso como condición que legalizaran al PCE. Y nosotros también tuvimos que poner como condición que legalizaran a otros partidos que supuestamente estaban a nuestra izquierda.

Puedo entender esa cesión, pero cuando no se cumplieron los Pactos de la Moncloa [de 1977], debimos haber salido a la calle, haber retomado el camino de tensión social. El Ejército, sin Franco y sin una Guerra Civil, no era el problema, como se vio después [el 23-F]. Sé que durante dos meses pudo haber sido el problema, pero los militares habrían acabado cuadrándose ante los banqueros. Nosotros hicimos virtud de la necesidad, pero al final nos convertimos en un monasterio de virtuosos. Nos pasamos.

- ¿Se siente cómodo con la actual dirección de IU y con la del PCE, dirigidos hoy por Cayo Lara y José Luis Centella, respectivamente?

- Me siento cómodo en la situación en la que estoy. Estoy en segunda línea, con mucho trabajo, pero sigo combatiendo. No tengo las tensiones inherentes a la presencia en primera línea, en la que no quiero estar. La mía es una militancia cómoda. Quizá sea la época de participación política en la que mejor me siento.

- Se lo preguntaré de otro modo, ¿IU y el PCE lo están haciendo bien?

- [Se lo piensa] IU hace lo que puede dada su situación actual. Soy de los que valoro el trabajo y la personalidad de Cayo Lara. Pero para mí IU adolece de no tener un sentido de colectivo estatal. No ve el horizonte en la inmediatez de un ayuntamiento.

- ¿Pero por qué IU no crece más en las encuestas? El 'Publiscopio' de noviembre le atribuía un 6,5%, frente a un 3,77% de las generales de 2008.

- Lo que estoy diciendo tiene mucho que ver. Ese discurso de Cayo, que yo comparto de la A a la Z, quisiera verlo repetido en la teoría y en la práctica, pero lo que no se puede hacer es pensar en apoyar una huelga general y después pensar en si en mi ayuntamiento voy a pactar con los socialistas. Es una incongruencia que no entiendo. Hay que acabar con eso.

- De hecho, uno de los puntos más polémicos del informe del coordinador en el último Consejo Político Federal aludía a la necesidad de reflexionar sobre la reedición de los pactos de gobierno con el PSOE tras las elecciones autonómicas y municipales del 22 de mayo de 2011. ¿Deberían romperse esos acuerdos?

- Ya respondí a esta cuestión en el último número de Mundo Obrero. Partimos de una falacia: creer que en España existe el reparto entre dos fuerzas al modo y uso de Europa. Es mentira. La derecha española no es la derecha europea. Sus postulados, sus maneras son totalmente retrógrados. Pero el PSOE ni es socialista ni es socialdemócrata. Pues bien, no se puede votar en un ayuntamiento a un PSOE que en el Estado despliega una política social, porque en ese municipio también se refleja la política general. Si no hay un acuerdo sobre un programa, vote al alcalde del PSOE y pase usted inmediatamente a la oposición, y una vez allí, negocie punto a punto cada tema. La historia de las pinzas [con el PP] se guarda ya en un arca porque es la idea más suicida y perversa que podemos tener. Y si se firma un acuerdo programático transido de línea política general –no olvidemos que somos una fuerza de carácter nacional, estatal–, necesitaría una comisión de seguimiento que se tiene que reunir cada cierto tiempo y tomar decisiones.

- ¿Se cree la refundación de IU, tal y como está marchando?

- El primer documento de refundación fue el que yo hice, en 2008. Tal texto fue aprobado por el PCE en su Conferencia Política de junio de ese año. Los militantes del partido tenían que haberlo defendido en la IX Asamblea Federal de IU, en pura lógica.

- Pero lo que se debatió y votó fue el documento de tesis, elaborado por la cúpula del partido.

- Como lo ignoro, no lo digo. En mi texto yo decía que las direcciones debían ir cambiando, que había que hacer un debate de abajo arriba, poner a cero los censos... Esa primera parte parece que no se ha cumplido, que hay reticencias. Yo constato que el documento que escribí y el que aprobó el partido no se parece mucho a lo que hay.

- ¿De qué reticencias habla? ¿Dónde y cuándo se pondrá el punto final a la refundación?

- Para mí IU ha sido y es la construcción de una alternativa de sociedad, de modelo de Estado y de gobierno, que tiene que trabajar desde abajo. Eso exige un tipo de organicidad como la elaboración colectiva, que se ha abandonado, y también un tipo de oposición como he señalado, otra forma de hacer política y de funcionar en las instituciones. Llegar a las instituciones no debe ser nuestra meta. Es un paso interesante, pero es un paso. Debemos recobrar el sentido de colectivo, de proyecto estatal, desde los Pirineos a Canarias.

- Le insisto: ¿tiene confianza en la refundación?

- Si es como yo la pensé y aprobó el PCE... No sé, porque ahora primarán los temas electorales. Sobre la gente pesa mucho qué pasará en 2011, cómo llegaremos a los comicios. Pero las posiciones tacticistas han muerto, hay que rediseñar la estrategia, reformular la utopía.

- Pero IU ya corre peligro. Su representación hoy en el Congreso es mínima: dos diputados, uno de ICV.

- Hay dos maneras de perder: yendo al asalto descabellado, desligado de la gente, y otra, consumirse como un brasero.

- ¿Qué papel debe tener el PCE?

- El PCE, tal y como lo concibo y lo expresé también en 2008, es una entidad pensante y combatiente (teoría y acción), pero su mensaje, sus convicciones, expresadas directamente a la ciudadanía, no se entienden. Debe haber un aparato mediador con el que se está de acuerdo en torno a la práctica, en la elaboración de un programa. Así se concibió IU. Eso significa que el PCE tiene dos obligaciones: su funcionamiento regular y también su implicación en entidades colegiadas o colectivos, sea IU u otra cosa. No entiendo la reduplicación de estructuras. No estoy pidiendo un partido de académicos, de gente con título. Pablo Iglesias [el fundador del PSOE] era intelectual, y he conocido jornaleros de mi partido que eran intelectuales.

- ¿Sigue defendiendo la 'teoría de las dos orillas'? ¿IU ha retomado su legado?

- Nunca me he enfadado con lo que de nosotros hayan podido decir los otros, pero siempre me sacaba de quicio que el discurso aprobado por los órganos de IU fuera contestado por los mismos que lo aprobaron. Eso es una práctica deshonesta. Yo nunca dije que PSOE y PP eran lo mismo. El castellano diferencia entre el verbo ser y estar. Lo expreso con otro ejemplo: un alfil blanco y otro negro se diferencian por el color, pero en el tablero... son lo mismo. La política económica, social, internacional, cultura... de PSOE y PP son una manifestación de un pensamiento conservador. Yo no fui el dogmático que no quise saber nada del PSOE. Le ofrecí pactos a Felipe González y no firmé la moción de censura contra él, como quería José María Aznar. Por tanto, ¿con el PSOE a toda costa? Nunca. Tendría que reproducirse una situación extrema, que pudiera recordar al Frente Popular [de 1936]. ¿Que viene la derecha? Sí, pero la política de derechas también la hace [José Luis Rodríguez] Zapatero.

- ¿IU entonces tiene más perfil que en la etapa de Gaspar Llamazares, de 2000 a 2008?

- Veo a mi coordinador bien, aunque las cosas no son iguales en todos sitios. Sentarnos en un sillón para poner nuestras posaderas, sin saber bien qué podemos hacer, no merece la pena.

- ¿Por qué hay dirigentes y militantes que se van de IU? Porque se sigue yendo gente...

- Ha habido un goteo constante, sí, y todos tienen su historia...

- ¿El proyecto de IU puede resultar excluyente?

- Voy por partes. Tenemos varias salidas en la época de Santiago Carrillo. Unos pensaban que el partido debía democratizarse... Ha habido un problema en IU que nunca resolvimos: las alianzas. En Francia, los dirigentes han vivido la unión de comunistas y socialistas. Pero aquí, en el franquismo, al no existir el PSOE, el concepto de alianza era otra cosa: capas sociales, movimiento, programa. Yo siempre abogué por la unidad, pero sobre un programa. Nunca se me dijo. Y ahí tienen ustedes a Nueva Izquierda, en el PSOE, aguantando unas disciplinas que en IU no fueron ni la décima parte. Por no hablar de ilustres secretarios de Estado [Diego López Garrido]. Luego IU no despega y la gente quiere tener su puesto al sol.

Al estar todo el día moviéndonos en el vaivén, llega un momento de fijar posiciones. Discutamos sobre alianzas sin subterfugios. Al final, se impone por la vía de la práctica ser el báculo del PSOE. Yo creo que con el PSOE hay que llegar a acuerdos programáticos, pero los justos, los cabales, sin engañarnos y sin engañarnos nosotros mismos.

- ¿Pero la casa de IU es hoy acogedora? Hay gente que se sigue yendo, en pleno proceso de refundación.

- Todavía en IU existe gente que es inquieta. No tenemos acciones de poder. Lo que pasa es que no hemos sabido canalizar esa rebeldía.

- Un ejemplo que le han mencionado mucho es el de la actual ministra de Medio Ambiente, Rosa Aguilar, persona de su confianza y que usted consideraba amiga.

- No quisiera hacer de esto una revista rosa. Mis hombres de confianza total y absoluta en IU eran Víctor Ríos, Paco Frutos o Salvador Jové. Rosa fue de mi confianza exclusivamente parlamentaria. Fue así, y no de otra manera. Otra cosa es que yo la conociera de Córdoba desde hacía mucho tiempo y que yo apoyara su candidatura como alcaldesa cuando fue designada por los compañeros de Córdoba yendo el último de la lista. Pasó el tiempo y no coincidimos, y nadie me oyó decir ni pío hasta abril de 2009 [cuando el presidente andaluz, José Antonio Griñán, la aupó a la Consejería de Obras Públicas]. Ahí dije que era un acto de transfuguismo. Ya está. No quiero hablar de esto mucho.

- ¿Por qué IU no ha promocionado a una generación de líderes jóvenes? A parte del electorado le puede resultar una fuerza con una clase dirigente poco renovada.

- Ser joven no significa en absoluto que se sea mejor, o más de izquierdas. La dirección es cuestión de inteligencia y de juventud de pensamiento. El mito de la juventud me la trae al fresco. Lo que hace falta es remover las direcciones, como yo propuse. Pero yo no hablaba de que entrase gente con pocos años.

- ¿Qué ocurre para que en España y en Europa triunfen los partidos de derecha? ¿Qué culpa tienen la izquierda y los sindicatos?

- La izquierda ha sido una aplicación herética de la derecha, ha participado del mismo modelo que ella. Cuando cayó el Muro de Berlín, la socialdemocracia se alzó como portavoz de la izquierda, y no dio la talla. Los sindicatos apoyaron el crecimiento sostenido, apoyaron el Tratado de Maastricht [de 1992] claro que tuvieron su responsabilidad en toda Europa. Se pusieron el dogal. Claro, se podía decir que entonces era muy difícil sustraerse a lo que decían los medios, a lo moderno. ¡Hicieron de la palabra modernidad la trampa para derechizarse! Bajo esta palabra la izquierda ha hecho sus peores disparates.

Ahora la izquierda está sin política, sin proyecto y sin ideas, cuando su modelo pasa por la contestación del mercado, la competitividad y el crecimiento sostenido, la trinidad del capitalismo. A esa situación se ha conducido ella solita. ¿Qué veremos en las próximas elecciones? La pelea de dos marcas distintas y de una sola política, con diferencias adjetivas, accesorias, pero no fundamentales, no estructurales.

- ¿Pero por qué los ciudadanos no confían en la izquierda alternativa?

- Los ciudadanos también tienen su parte de responsabilidad, aunque están mediatizados, porque la prensa media desde sus intereses económicos y editoriales. Luego hace falta una imagen, pero no la que crean los laboratorios. Hace falta crearse la estirpe de dirigentes, no el flan y la compota de los líderes de hoy.

Pero la izquierda debe hablar de derechos y de deberes, al mismo nivel. Hace años, vi un cartel de Largo Caballero en la sede de UGT de Cartagena que decía: "A los trabajadores, hay que decirles la verdad, aunque no les guste". Es la verdad. Siempre me negué a decir que el partido defendía a los trabajadores. El PCE lucha con los trabajadores que quieren pelear, y si no que aguanten con lo que hay. El partido está contigo, en la vanguardia, pero no es tu redentor, tu abogado defensor. Si no, se hace un discurso aparentemente de izquierdas, pero muy reaccionario en el fondo: a la gente no la haces participar, la representas. Y eso va contra los principios de la izquierda.

El ajuste salarial que viene

Amparo Estrada (Público)

Tema: Economía

Los caciques no han desaparecido en el digitalizado siglo XXI. Su espíritu sigue habitando entre nosotros y ahora está en ese fantasmagórico concepto llamado mercados. Lo que está pasando hoy es una analogía de aquella caciquil y dramática España franquista rural, que retrató magistralmente Delibes en Los santos inocentes. El cacique, dueño del destino de todos, es un ser egoísta, cruel, indiferente al sufrimiento de sus siervos a los que humilla. Va siempre a lo suyo y todos están a su servicio: Paco el bajo, la Régula, el retrasado Azarías…

Iván, el cacique de Delibes, sólo se topa con su castigo después de matar por capricho a la milana bonita, la única amiga de Azarías: el santo inocente venga a su querido pájaro y ahorca a Iván.

Caciques financieros, ivanes, son hoy los que mandan en los mercados internacionales, los que dicen que nuestras pensiones son excesivas, que nuestras casas son basura, que los derechos laborales son superfluos y que hay que recortarlos o acabar con ellos… Aquí manda el capital, los nuevos caciques, no las cartas de derechos fundamentales de los ciudadanos. El pastel es suyo y se lo reparten.

Pero la paciencia ha empezado a colmarse. Mal asunto. Hemos visto en el mismo día huelga general en Portugal y protestas masivas en Reino Unido e Italia. Los santos inocentes que se manifestaban saben que la avaricia implacable de los mercados provocó la crisis pero que la factura la pagamos nosotros.

Zapatero pide hoy a 39 grandes empresarios que inviertan aquí y que creen empleo. Seguro que habrá buenas palabras. Pero los empresarios, la mayoría de los cuales tienen grandes intereses en el exterior, advierten que ellos se deben a sus accionistas y a intentar obtener la mayor rentabilidad porque así funciona el capital, incluso con los pequeños ahorros. ¿Cuántos de nosotros si podemos elegir entre depósitos a plazo de distintos bancos optamos por el que ofrece el menor tipo de interés?

Así que los empresarios buscan maximizar el beneficio mientras el Gobierno está componiendo un nuevo mantra de moderación simultánea de beneficios empresariales y salarios para conseguir mayor competitividad. La primera parte no se va a cumplir, porque cualquier empresa que reduzca beneficios se verá penalizada en bolsa y a la hora de obtener financiación. Y ninguno se quiere suicidar financieramente.

La segunda parte de la salmodia, el ajuste salarial, dadla por hecha. De eso vamos a oír hablar mucho. Aunque nuestro problema es más de baja productividad que de altos costes laborales. El modelo de crecimiento económico en España se ha basado en sectores poco productivos, con empleos de baja cualificación, escaso sueldo y mucha temporalidad. El salario medio español es la mitad que el inglés, el holandés o el alemán, y un 20% inferior a la media de la UE. Este dato es comprobable en el informe del IESE sobre la evolución del salario en 14 países europeos entre 2003 y 2008.

No sé cómo acabará esto. En el libro de Delibes, Azarías vengó a la milana bonita y a todos los santos inocentes. Claro que se trataba de literatura. De la buena.

La alternativa republicana

José Luis Centella, Gloria Aguilar (Público)

Tema: Política

Cuando el PCE convocó su I Conferencia Republicana, que se celebra hoy, algunos amigos bienintencionados nos preguntaron por qué, “con la que está cayendo”, nos metíamos a discutir sobre la República, cuando deberíamos hablar solamente de la crisis y cómo salir de ella. Nuestra contestación fue que, precisamente “con la que está cayendo”, ahora que sufrimos una profunda crisis económica, financiera, energética, medioambiental, de valores, de civilización, es cuando tenemos que plantear una acción global, y por ello nos proponemos hablar de la opción republicana como una fórmula que permitiría resolver mejor los problemas que tenemos que afrontar en la España actual.

Para ayudar a la salida conservadora de la crisis, en la que coinciden el Gobierno y la derecha política y económica, se recortan libertades y derechos democráticos con el fin de que sean unas oscuras leyes del mercado las que nos gobiernen, y para facilitar esta tarea se ha blindado un modelo de Estado monárquico y bipartidista. No es casual que el propio monarca se haya implicado personalmente en forzar el consenso en torno a la salida conservadora de la crisis.

El PCE considera que existe una censura por parte de los grandes poderes sobre el debate monarquía-República. Cuando desde el partido nos marcamos el objetivo de la III República, lo hacemos con la voluntad de avanzar hacia una alternativa global al actual sistema que nos ha llevado a la mayor crisis de la historia reciente de España. En función de este objetivo, hacemos una serie de precisiones:

En primer lugar, queremos subrayar que la Primera y la Segunda República son para nosotros referencias históricas indispensables para marcar el hilo conductor del pensamiento republicano, como lo es también recoger y actualizar aquellas propuestas que sirvan para este siglo XXI. Pero, sobre todo, queremos afirmar que la mayor parte de nuestro esfuerzo debe dedicarse al hoy y al mañana. La Segunda República supuso un grito de libertad y la consecución de un anhelo de justicia que trataba de romper con siglos de sumisión y oscurantismo. Fue conquistada por el pueblo de forma pacífica tras las victorias de las candidaturas republicanas en las elecciones municipales, y el 14 de abril de 1931 una marea humana llenó las calles y plazas de los pueblos y ciudades de España, generando ilusión y esperanza.

En segundo lugar, la República no es simplemente una forma de Estado que se caracteriza esencialmente por hacer electiva la jefatura del Estado en vez de que esta sea hereditaria; es mucho más que eso, aunque esa condición de elegibilidad sea imprescindible. La República es una concepción de Estado caracterizada por unos determinados principios, valores, contenidos, funcionamiento institucional y vinculación a la realidad social de la cual emana como representación libremente consentida. En consecuencia, la República no es otra cosa que el marco económico, social, político, cultural e institucional del que los ciudadanos y ciudadanas se dotan libremente y por el que se consienten para afrontar los problemas y sus soluciones. Para ello planteamos unos ejes que conforman nuestra propuesta republicana:

Asegurar que todos los recursos del Estado se pongan al servicio del interés general, que la economía esté al servicio de la persona en lugar de poner a la persona al servicio de la economía, y, sobre todo, que permita una justa distribución de la riqueza.

Defensa de los derechos humanos, entendidos en su sentido más amplio, denunciando que la Declaración Universal de los Derechos Humanos ha sido mutilada, deformada, en beneficio del desarrollo del capitalismo. Consideramos que los derechos humanos, o se cumplen en su totalidad, o son una trampa para imponer el dominio de una minoría sobre los intereses de la mayoría.

Democracia radical que haga al ser humano ciudadano en su sentido más amplio en lugar de consumidor, a que lo condena el actual modelo de democracia de baja intensidad, y que permita la participación de las trabajadoras y trabajadores en la planificación de la economía.

Un Estado laico, en el que el papel de cualquier Iglesia o creencia se circunscriba claramente al ámbito privado.

La paz: un objetivo, un camino, una cultura, un aprendizaje, un derecho y un deber.

El protagonismo de la educación, la investigación y las virtudes cívicas que deben conformar los derechos y deberes ciudadanos, así como el funcionamiento de las administraciones públicas: austeridad, rigor y primacía de lo público.
Un Estado federal en una Europa federal.

El proyecto republicano no debe ser encasillado en función de la terminología referida a espacios en el espectro político. Pretendemos darle a nuestra propuesta una entidad que la haga accesible y llamativa, ligándola a lo concreto, a los problemas reales de la mayoría de población, porque la propuesta de República consiste en la reforma económica, social, política e ideológica y en la introducción de nuevos valores en la situación real. En este contexto, el PCE se manifiesta a favor de la unidad de un movimiento republicano que cada día cobra más fuerza entre los ciudadanos, especialmente entre la juventud, y quiere contribuir a la movilización ciudadana para que esta sea una alternativa democrática a la realidad existente, una alternativa que debe ser conformada, desarrollada y apoyada por el mayor respaldo ciudadano. La República no viene; se trae construyéndola. Esta es la tarea a la que quiere convocar el PCE desde su Conferencia Republicana.

El ruido y el rezo

Antonio Izquierdo (Público)

Tema: Inmigrantes

La inmigración es estructura, como lo es la democracia. Y estructura es aquello que dura. Así, los datos para comprender qué aporta la inmigración en tanto que población que no sólo trabaja, sino que escucha música, va al fútbol y manda mensajes a través del teléfono móvil, han de mirar, por fuerza, más allá de la coyuntura económica y de la electoral. Su contribución se aprecia, con más templanza, en el medio y en el largo plazo.

De ahí que los datos estructurales no suelan coincidir con las encuestas “electorales”. Al igual que discrepa la evidencia aquilatada de lo que son sólo pronósticos. La perspectiva es distinta porque unos son datos contantes y los otros sonantes. Aquí van dos ejemplos. El primero es un informe que ha requerido varios años de estudio y que ha sido realizado por investigadores de la Universidad de Lille por cuenta del Ministerio de Asuntos Sociales. El otro es un sondeo ocasional, publicado por el diario El Mundo, que apuntala la política de enfrentamiento entre autóctonos e inmigrantes.

El Estado francés recibe de los inmigrantes un saldo positivo de 12.400 millones de euros una vez que se han computado las contribuciones y las prestaciones. Las grandes partidas de su aportación son las cotizaciones sociales (26.400 millones) y los impuestos sobre el consumo (18.400 millones), mientras que sobresalen los costes en pensiones (16.300) y en sanidad (11.500). En total reciben de los presupuestos del Estado 47.900 millones pero pagan 60.300 millones. Es el resultado de que mantengan una estructura por edad más joven y lleven un siglo de arraigo. Coinciden, además, estos investigadores con los datos difundidos por la Agencia Tributaria, cuando aseguran que el salario medio de los nativos duplica al de los foráneos.

Por otra parte, el sondeo electoral no suele registrar las percepciones sino que primero las construye y luego las corrobora. Así, en esta encuesta se les pregunta a los catalanes si prefieren vivir junto a una discoteca (sic) o al lado de una mezquita y se ratifica que el 61% quiere prohibir el burka en todos los lugares (sic) y que el 48% apoya la imposición de un “contrato de integración” que incluye abandonar el país (sic) en caso de perder el empleo. ¿Desde cuándo se llama integración a la firma de un despido y a elegir entre el ruido y el rezo? Lo dicho, datos sonantes.

Mucho más que la 1.325. La resolución de la ONU busca proteger a las víctimas en los conflictos bélicos

Ana Rosa Alcalde (Público)

Tema: Mujer

Este año, el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer tiene un apellido especial. Se llama diez años de la Resolución 1.325. Detrás de la terminología se encuentra el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas acordando impulsar la protección de los derechos las mujeres y niñas en los conflictos armados, y reconociendo el papel de las mujeres en la construcción de la paz.

Detrás del número 1.325, se encuentran millones de mujeres que han participado en los más de 30 conflictos armados ocurridos en la última década. Mujeres que, como ya sabemos, han sido víctimas civiles de numerosos conflictos y han sufrido violencia sexual sistemática como arma de guerra. También han sido, como apenas sabemos porque se cuenta menos, combatientes, guerrilleras y niñas de la guerra.

Pero por encima de todo, han sido el único vínculo entre la destrucción y la vida, las diseñadoras y perpetradoras de acuerdos de paz, reconstructoras de vínculos y diálogo con los anteriores enemigos. Y cuando los procesos están en marcha, las ganancias de la paz no se han destinado a conseguir la igualdad de esas mujeres y el respeto de sus derechos. Esta es la principal lección de historia que recoge la Resolución 1.325.

- Agendas y derechos.

Detrás de esos millones de mujeres se encuentran sus organizaciones, sus redes, sus espacios de encuentro. Sumando uno a uno, se crean colectivos para articular agendas y se exigen derechos frente a las violencias que sufren, en tiempos de guerra y en tiempos de supuesta paz. Porque es difícil afirmar que hay paz cuando el Fondo de Naciones Unidas para la Mujer (UNIFEM) estima que seis de cada diez mujeres han sufrido alguna vez a lo largo de su vida violencia física o sexual; o que cada 15 segundos, en alguna parte del mundo, una mujer es agredida.

Estas cifras alarmantes apenas están variando de año a año, y demuestran que el mensaje principal que tenemos que asumir las ciudadanas y ciudadanos del mundo es que la violencia contra las mujeres, por el hecho de ser mujeres, es un problema global de gran envergadura que afecta a todas las sociedades, y cuyas dimensiones trascienden todas las fronteras. Detrás de las organizaciones de mujeres, se encuentran las alianzas que estas llevan años tratando de tejer con otros actores. Con los estados más comprometidos, que van avanzando lentamente todavía, en políticas públicas y en sistemas de justicia más eficaces para eliminar la violencia de género, y en planes para garantizar la aplicación de la Resolución 1.325.

Trabajando con otras organizaciones de sociedad civil, que desde otros ámbitos no vuelven la cabeza ante la realidad patente de la violencia contra las mujeres y se comprometen para apoyarlas. Este es el caso de las organizaciones e instituciones que hemos promovido esta semana la campaña Tu Voz Cuenta (iniciativa de la sociedad civil en la que han participado 12 organizaciones, redes e instituciones) para visibilizar las violencias contra las mujeres en el mundo.

- De carne y hueso.

Finalmente, detrás de la Resolución 1.325 hay mujeres reales de carne y hueso. Algunas de ellas son mundialmente conocidas y marcan línea, pero la mayoría son mujeres anónimas y poco conocidas que contribuyen a cambiar el mundo. Un día como hoy debería contribuir a visibilizar su trabajo y el de sus organizaciones, porque, a pesar de los pequeños avances de estos últimos diez años, todavía queda mucho por hacer.

Las mujeres tienen su agenda. La primigenia, la más básica, es que se acabe de una vez por todas con las violencias que sufren las mujeres sólo por el hecho de ser mujeres. En tiempos de guerra y en tiempos de pretendida paz.

Las tres queridas. Las dudas del mercado sobre España

Ernesto Ekaizer (Público)

Tema: Economía

Cuando se elogia mucho en estos tiempos a Brasil, hay que tocar madera. Hay un maleficio según el cual cuando un país se convierte en una darling (querida en inglés) de los mercados le llega hora en que las campanas doblen por él. Es lo que pasó con la Argentina de los años noventa. Y es lo que ha ocurrido con Irlanda, ahora en quiebra, y con España, que ha dejado de crear durante el boom inmobiliario la mayor parte de los empleos de la eurozona a ser el más grande depredador de ello. Y como las otras dos naciones, España llegó a ser la querida de los mercados. De querida a malquerida.

Cada vez más, el pasado se metamorfosea en el presente. La actual crisis en la eurozona remite a la de los años noventa, cuando tras la subida de tipos de interés del Bundesbank alemán, la economía europea entró en recesión. En septiembre de 1992, la libra esterlina y la lira italiana abandonan el Mecanismo de Cambios del Sistema Monetario Europeo, con bandas de fluctuación, arriba o debajo de la paridad central, del 2,25%.

- Devaluación de la peseta.

Pero ante la persistencia de los movimientos de capitales contra la incipiente unión monetaria, sobreviene la hábil decisión de ampliar el margen de fluctuación al 15% para todas las monedas con la excepción del marco alemán y el florín holandés, que mantienen el 2,25%. Entonces, la peseta tuvo que ser devaluada en tres ocasiones entre 1992 y 1993.

Lo que evoca esta situación histórica ha sido, precisamente, las declaraciones del presidente del Bundesbank y miembro del consejo del BCE, Axel Weber, en París y Berlín, según las cuales el euro será defendido contra los movimientos especulativos. Weber ha señalado que si hace falta, el Fondo de Estabilización creado el pasado mes de mayo junto con el FMI, puede ser aumentado por encima de los 750.000 millones de euros.

Los comentarios de Weber estaban dirigidos sin duda a calmar la presión de los inversores en bonos portugueses y españoles, los dos países que ha sido señalados como objetivos después de Irlanda. Tras sus palabras, el mercado ha comenzado a preguntase si el presidente del Bundesbank, en realidad, no estaba dando, como quien no quiere la cosa, información de lo que va ocurrir próximamente. Y todos los indicios apuntan a ello.

Paul De Grauwe, de la Universidad de Lovaina (Bélgica), que asesora al presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, ha advertido a título personal, desde diciembre pasado, que la eurozona y el BCE no debieron dilatar su apoyo a Grecia y que la cláusula de "no salvamento" del Tratado de Maastricht en ningún caso podía ser utilizada para justificar la pasividad inicial que promovía en su momento el Gobierno alemán, más pendiente de las elecciones regionales en Renania del Norte Westfalia que de la crisis.

Ahora, De Grauwe sostiene que sería un error estratégico aprobar un mecanismo de default (impago), como propone el que Alemania. En cambio, insiste en una idea planteada por él con anterioridad, a saber, la creación de un Fondo Monetario Europeo cuyo cometido sería el de garantizar la liquidez mientras tienen lugar los ajustes económicos, lo cual dejaría fuera de combate a las presiones especulativas de los mercados. Si fuese necesario en cierto momento, se podría pasar a una fase de reestructuración de deuda, pero sin la pistola de los mercados apretando la sien.

Sundus Abass: "Los políticos sólo aplican el islam contra las mujeres"

Óscar Aboou-Kassem (Público)

Tema: Mujer
Cada vez que tiene que dejar su casa por más de un día, Sundus Abass (Bagdad, 1964) les recuerda a su padre y a sus sobrinos dónde guarda el dinero y los documentos importantes. Un bombardeo de EEUU mató a su hermana en 2003 y la violencia sectaria que arrasaba Irak en 2006 se llevó también a su hermano. Abass tiene miedo a morir sin haber logrado algo importante para la sociedad iraquí. Desde 2005 dirige la ONG Women's Leadership Institute, dedicada a fortalecer el papel de las mujeres en todas las instituciones iraquíes. No lleva hiyab por elección personal: "Si me dijeran que llevando el hiyab se acabaría la violencia me lo pondría, pero ese no es el problema". Abass visitó Madrid invitada por Casa Árabe dentro de las jornadas dedicadas a Irak.

- Hay tres millones de viudas en Irak, ¿Qué futuro hay para ellas?

- Hasta ahora no hay programas para atender a las viudas. El Gobierno ha sugerido que los hombres que se puedan permitir más de un matrimonio se casen con las viudas como segunda o tercera esposa. Lo único que se consigue así es duplicar los problemas de las viudas y de la propia familia que las acoge.

- El 90% de las mujeres sólo tiene educación primaria. ¿Se está tomando alguna medida?

- Desde 2003 muchos iraquíes dejaron de estudiar, especialmente en educación primaria y sobre todo en las zonas rurales, por el miedo que tienen los padres. Siempre que presionamos al Gobierno para que tome medidas nos dicen que están ocupados con la seguridad o con la formación de Gobierno. Llevamos siete años así.

- ¿Cuál son los principales objetivos de su ONG?

- Intentamos proteger a las mujeres iraquíes de todas las formas de violencia. También las animamos a participar de una forma más activa en la vida política y social y en especial en el acceso a los puestos de toma de decisiones para proteger a las mujeres y sus derechos.

- En la Constitución iraquí hay artículos en los que se exige el permiso del marido para obtener pasaporte.

- Estamos trabajando para que se modifiquen este tipo de artículos en la Constitución, que está en fase de enmienda. El pueblo iraquí siempre ha respetado a las mujeres. Las doctoras no piden permiso a sus maridos cada vez que tienen que tomar una decisión sobre un paciente. Durante la guerra contra Irán (1980-88) éramos las mujeres las que sosteníamos Irak y nadie nos cuestionaba. En 2003 nos prometieron la democracia y a nivel humanitario ha resultado ser peor que antes. Entonces no había libertades pero había seguridad.

- ¿Ha aumentado la violencia contra las mujeres desde 2003?

- Sí y en diferentes formas. La doméstica, la que se produce en las calles y también en sus puestos de trabajo. No tenemos ninguna ley relacionada con la violencia contra las mujeres. Desgraciadamente forma parte de nuestra cultura que para ser una buena mujer tienes que ser muy paciente y no quejarte de nada.

- Acabar con el tráfico de mujeres figura entre las prioridades de su ONG.

- Este fenómeno empezó a finales de los años noventa cuando bajo el embargo económico internacional reinaba la pobreza. Llegaban tipos de Siria o de Dubai y buscaban chicas jóvenes para casarse. Para las familias suponía un alivio porque no podían ni darles de comer. Al final, las chicas acababan de prostitutas en Siria o en los Emiratos. Desde 2006, el tráfico se ha multiplicado. Las pocas chicas que pueden escaparse no lo hacen por el miedo a ser repudiadas por su familia.

- ¿Cree que el sectarismo puede provocar nuevas leyes contra las mujeres?

- Es muy duro para nosotras ver cómo los partidos islámicos olvidan todo lo relativo al islam y sólo se acuerdan de lo que está relacionado con la opresión de la mujer.

La tragedia del Sáhara

Ana Manero Salvador (Público)

Tema: Saharauis

La actuación represiva llevada a cabo por las fuerzas de seguridad marroquíes en la capital del Sáhara Occidental ha puesto de manifiesto la absoluta indiferencia del Gobierno de Marruecos por el respeto de los derechos humanos más elementales. Esta situación de violencia ha sido observada con cautela y distanciamiento por el Gobierno español, que no ha hecho sino realizar declaraciones confusas que suponen, nuevamente, un intento de obviar la responsabilidad de nuestro país como antigua potencia colonial del Sáhara.

España abandonó el Sáhara Occidental a su suerte en 1976 incumpliendo su obligación, que no era otra que la de haber garantizado el ejercicio del derecho a la libre determinación por parte del pueblo saharaui, derecho consistente en asegurar y llevar a cabo la celebración de un referéndum de autodeterminación, tal y como Timor Oriental pudo realizar en 1999, gracias, entre otras razones, al apoyo de la antigua potencia colonial, Portugal.

En este sentido, resulta sorprendente la postura del Gobierno español. Uno de los ejes de la campaña electoral de 2004 que llevó a José Luis Rodríguez Zapatero a presidir el Gobierno de España fue la defensa del derecho internacional en la acción exterior. Esta postura adquirió cuerpo con la retirada del ejército español de territorio iraquí, ocupado tras la agresión iniciada en 2003 liderada por Estados Unidos y Reino Unido. Pero el derecho internacional no se acaba en Irak, sino que España tiene responsabilidades en el Sáhara Occidental. ¿Por qué razón?

El 24 de agosto de 1974, España anunció que celebraría un referéndum de libre determinación en el Sáhara, pero Hassan II hizo todo lo que estuvo en su mano para retrasar su celebración, aprovechando la situación de inestabilidad política que se vivía en España a comienzos de la Transición. En este contexto, la Asamblea General de Naciones Unidas solicitó un dictamen a la Corte Internacional de Justicia sobre la cuestión del Sáhara Occidental, en el que el tribunal manifestó que no existía un título de soberanía ni por parte de Mauritania ni de Marruecos sobre el Sáhara, sino que debía ejercerse el derecho de libre determinación de acuerdo con la resolución 1514 (XV) de la Asamblea General de Naciones Unidas.

Como respuesta a dicho dictamen, Hassan II promovió la ocupación de la antigua colonia mediante la Marcha Verde que, a pesar de las solicitudes de retirada por parte del Consejo de Seguridad (Resolución 380), prosiguió y dio lugar a los vergonzantes y nulos Acuerdos de Madrid. La ocupación militar del territorio desencadenó un conflicto armado internacional entre la potencia ocupante –Marruecos– y el legítimo representante del pueblo saharaui –el Frente Polisario–.

El alto el fuego auspiciado por Naciones Unidas en el marco del Plan de Arreglo dio lugar al despliegue de la Misión de Naciones Unidas para el referéndum del Sáhara Occidental (Minurso) en 1991. Desde entonces, tanto Hassan II como su hijo, Mohamed VI, han dinamitado el avance del proceso, manteniendo una postura de absoluta mala fe. Primero, hicieron naufragar el Plan de Arreglo planteando objeciones sistemáticas a la confección del censo, ante las que las autoridades saharauis se plegaban sistemáticamente. Y es que la comunidad internacional ha tratado de alcanzar soluciones que en absoluto son las justas y que suponían el desprecio de la letra del plan al dar cabida a la presencia de colectivos marroquíes, incluso colonos, a pesar de que las prescripciones eran claras: el censo debía contener únicamente la actualización del censo español de 1974, teniendo en cuenta las peculiaridades de la población saharaui, nacimientos, muertes y desplazamientos. Tras este fracaso, y en segundo lugar, el secretario general de Naciones Unidas promovió los llamados Plan Baker I y II.

El más conocido por todos, el Plan Baker II, preveía una autonomía temporal para el Sáhara, tras la cual se celebraría el referéndum. Fue aquí cuando Marruecos rechazó de plano la posibilidad de plantear la independencia en la consulta y dio al traste con el proceso. Desde entonces, Marruecos ha defendido la llamada “solución realista”, en la que niega al pueblo saharaui su derecho y chantajea a la comunidad internacional, autoproclamándose adalid de la lucha contra el terrorismo islámico y la emigración irregular, sin que nadie se pregunte por el respeto de los derechos humanos en estos ámbitos. Así pues, el Sáhara Occidental tiene una condición jurídica distinta y separada de Marruecos que tiene la obligación de respetar, entre otros instrumentos relativos a la protección de los derechos humanos, uno de los textos esenciales de derecho internacional humanitario: el IV Convenio de Ginebra, violado desde la ocupación y hecho trizas desde el lunes 8 de noviembre.

Por todo ello, el Gobierno de España, si realmente mantiene su compromiso con el derecho internacional, debe exigir a Marruecos el cese inmediato de la represión, así como impulsar el ejercicio del derecho a la libre determinación del pueblo saharaui. La apuesta por la realpolitik no es una alternativa, ya que España debe asumir de una vez por todas su responsabilidad siguiendo los pasos de Portugal en la situación hermana de Timor Oriental, que sentó a Indonesia a negociar, consiguió el ejercicio del derecho a la libre determinación y cumplió así con su histórica obligación de antigua potencia colonial.

Blindados del Ejército para aplastar la revuelta de los ‘narcos’ brasileños. Una ola de ataques indiscriminados siembra el caos en Río de Janeiro

Luis Tejero (El Mundo)

Tema: Brasil

No es una novedad que los poderosos narcotraficantes que gobiernan las favelas de Río de Janeiro se líen a quemar neumáticos, coches o autobuses. Sí es nuevo que las dos grandes facciones criminales de la segunda urbe brasileña –hasta ahora enemigas a muerte– decidan aliarse para sembrar el caos en las calles. Y extraordinaria ha sido también la respuesta del Ejecutivo, que ha enviado a seis vehículos militares a la favela Vila Cruzeiro.

El objetivo de la tropa de élite de la Policía Militar –reforzada con blindados de la Marina y equipamiento bélico, gafas de visión nocturna incluidas– es aplastar la revuelta sin contemplaciones. «Esta guerra no la empezamos nosotros. Fuimos provocados a entrar en ella y vamos a salir victoriosos», advirtió el coronel Lima da Castro.

Según las autoridades, la participación de la Armada en las operaciones será solamente logística. Los blindados del modelo M113 están equipados con armamento de guerra y son conducidos por militares, pero las operaciones serán realizadas por agentes de la Policía.

Todo para detener una especie de guerra de guerrillas que desde el domingo se ha llevado por delante más de medio centenar de vehículos y ha desatado una contundente reacción oficial con el resultado de al menos 30 víctimas mortales, entre ellas varios inocentes cuyo único pecado era vivir en las barriadas de la Cidade Maravilhosa. Pero no sólo está amenazada la reputación de Río, sino la de todo un país que se ha comprometido a albergar con garantías de seguridad el Mundial de fútbol del año 2014.

Protestan los narcos cariocas porque el Ejecutivo regional que lidera Sérgio Cabral, aliado de Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff, lleva dos años desterrándoles del sur de Río –barrios de clase media como Copacabana, Ipanema o Botafogo– y recientemente también de la zona oeste. Numerosas comunidades humildes que ocuparon durante décadas se encuentran ahora bajo la protección de las Unidades de Policía Pacificadora, con las consecuentes pérdidas económicas para quienes dirigen el negocio de la droga.

Pero los bandidos, como se conocen en Brasil, han dicho «basta». Se niegan a seguir exiliándose hacia el norte y a pelear por cada metro cuadrado de las colinas donde recomponen sus cuarteles. Porque en esos montes ya habitan otros narcos que se resisten a dejar espacio a los expulsados del sur y del oeste. Y la mezcla acostumbra a ser, literalmente, explosiva.

Ante este panorama, las bandas se han puesto de acuerdo para rebelarse contra la policía atacando de forma simultánea diversos puntos de la región metropolitana de Río, que abarca una población de más de 11 millones de personas. Ayer, por quinto día consecutivo, ardieron vehículos de toda clase: turismos, autobuses, motos y hasta un camión de transporte. En algún caso, con consecuencias que pudieron ser fatales para sus pasajeros, como los siete que atravesaban una avenida de la zona norte de la ciudad cuando fueron abordados por un grupo de vándalos.

«Los bandidos no nos dejaban salir y tuvimos que saltar por la ventana. Si el autobús hubiera estado lleno, habría ocurrido una tragedia», relató Luiz Mendes a O Globo.

En respuesta a la ola de ataques indiscriminados, los 17.500 agentes que se encuentran en estado de alerta prosiguieron con sus incursiones en una treintena de favelas para dar caza a los responsables de la violencia urbana e incautarse de parte del arsenal que guardan bajo llave los jefes de la droga, desde pistolas, fusiles y escopetas hasta granadas y bombas caseras.

Los bandidos ya habían sembrado el caos el año pasado, dos semanas después de que Río se impusiera a Madrid como sede olímpica de 2016. Entonces los narcos incluso derribaron un helicóptero de la Policía con seis agentes a bordo.

Saharauis de Tinduf denuncian la violencia contra las mujeres

M. Verdaguer (El Mundo)

Tema: Saharauis
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Mientras la Eurocámara emitía ayer la resolución de condena al ataque marroquí al campamento saharaui de Gdeim Izik, la Unión Nacional de mujeres de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) y otras 20 asociaciones de mujeres, se manifestaron a primera hora de la mañana en la ‘wilaya’ (gobernación) de Auserd, en los campamentos de refugiados cerca de Tinduf, Argelia. Decenas de mujeres, algunas vestidas de negro en señal de luto, se manifestaron contra la violencia de género ejercida por las autoridades marroquíes en los territorios ocupados y condenaron la situación actual en El Aaiún.

Las manifestantes se concentraron en una zona deshabitada y avanzaron en forma de marcha unos pocos metros, al finalizar su recorrido continuaron los gritos y una voz femenina clamó desde un todoterreno, y con la ayuda de un megáfono, lemas como: «Nos reímos del padre del rey de Marruecos» o «Tranquilos mártires, nosotras seguimos vuestros pasos». La marcha también sirvió para recordar a los activistas en El Aaiún, entre ellos Aminatu Haidar, a través de pancartas con sus fotos.

Las marchas en Tinduf han sido convocadas por el mismo Frente Polisario y otras asociaciones. Pero no ha sido la única forma con la que la RASD ha reaccionado a los sucesos de El Aaiún. El domingo, el Ejército realizó maniobras en el llamado «territorio liberado». Unos 22 camiones cargados de soldados salieron el domingo de los campamentos de Tinduf para dirigirse a la segunda región militar, cerca de Tifariti, a ocho horas de viaje a través del desierto, con el objetivo de prepararse ante un posible ataque marroquí. Allí, un batallón mecanizado con cerca de 1.800 soldados, hizo una demostración de fuerza. Incluso desfilaron ex combatientes de la guerra que terminó en 1991, algunos de más de 70 años. Según el jefe de esta región militar, Brahim Beidila, el Ejército del Frente Polisario cuenta con cerca de 15.000 hombres y seis batallones, uno de ellos de defensa antiaérea.

Beidila opina que el muro construido por Marruecos no es ningún obstáculo para la guerra: «Conocemos el muro palmo a palmo».

Carlos Alberto Biendicho. Un activista gay en el PP

Luis Antonio de Villena (El Mundo)

Tema: Comunidad LGBTIQA
Conocí a Carlos Alberto Biendicho en varios bares de Chueca, en Madrid. Era delgado, ágil, polemista y estaba lleno de rabia contra las injusticias del mundo, por eso (y porque era homosexual y no quería ocultarlo) fue un militante histórico a favor de los derechos de gays y lesbianas. Por ello nos extrañaba a muchos que Biendicho fuera militante del PP –donde aseguraba que hay muchos gays y lesbianas, cuyos nombres tenía anotados– y que incluso dentro del partido fuera el fundador de una llamada Plataforma Popular Gay.

Nació en Brasil hace 55 años, aunque se trasladó a vivir siendo muy niño a Zaragoza (la familia va a trasladar allí sus restos mortales). Al echar una ojeada a su biografía llena de combates, uno se da cuenta de algo: a Biendicho le atraían instituciones que suelen considerarse de derechas y en las que creía –ciertamente hay muchos homosexuales de derechas–. Pero cuando formaba parte de ellas y quería introducir su espíritu reformador, todo eran polémicas y trifulcas.

Carlos Alberto había sido en su juventud seminarista, pero lo había dejado. Por eso aseguraba, asimismo, que las sotanas ocultaban homosexualidad innúmera. Luego fue capitán del Arma de Ingenieros, pero fue expulsado (es decir, era ex capitán) porque hasta 1986 la homosexualidad era ilegal dentro del Ejército Español. Con todo, entre los muchos denuestos y furias que le oí a Biendicho contra el PP y contra la Iglesia Católica, nunca le oí hablar mal del Ejército.

Carlos Alberto creía en la posibilidad de una derecha española, plenamente de derechas, pero moderna y laica. Su mayor disgusto (portador ya del virus del sida, seropositivo) fue constatar en carne propia que su partido estaba muy lejos de la derecha que él deseaba. ¿Por qué no se fue, como le aconsejaban muchos? ¡Ni hablar! Él quería pelear, pero no dejarlo. Habló con Fraga, con Ana Mato, con el propio Rajoy y –según él– todos le llenaban de buenas palabras y de promesas que luego nunca cumplían. Lo peor que le oí decir a Biendicho contra los líderes populares (y lo decía con dolor propio) es que eran «hipócritas».

Biendicho, después de innumerables batallas en favor de la igualdad, terminó combatiendo contra el VIH y contra un cáncer que, después de mucha quimioterapia y otras lindezas, acabó con su vida el pasado 16 de noviembre. Es de justicia reconocerle como un luchador nato por las libertades del colectivo LGTB y contra el sida. Los foros gays de Internet (como dosmanzanas.com) se hicieron muy pronto eco de la noticia, dada por sus amigos y cercanos como Carla Antonelli.

Biendicho era incómodo para casi todos porque nunca se callaba, pero, sin duda, fue un hombre muy generoso y muy valiente. Extrañamente, tanto el PP como cierta Iglesia católica, pierden (a la par y contradictoriamente) a un terrible fustigador contra muchos de sus principios, pero a los que, al mismo tiempo, echaba de menos. Biendicho fue cristiano y de derechas, pero no se cansaba de decir que el PP era una cueva de falsedad y que la Iglesia católica (llena de gays) estaba atrasada. Enemigos ambos del colectivo LGTB, Biendicho los quiso amigos, pero ¡ay! no pudo lograrlo.

Más allá del 28-N catalán

María José Canel (El Mundo)

Tema: Elecciones

Las informaciones sobre los posibles resultados del domingo consolidan la tendencia con que se inició la precampaña: se avecina un cambio de Gobierno en Cataluña.

Las encuestas a día de hoy (incluidas las publicadas fuera de España) dibujan lo siguiente: no hay duda de que gana CiU, que se acerca a la mayoría absoluta; el PSOE pierde hasta un 7% del voto (lo que supondría colocarse en la mitad de los escaños de la fuerza más votada); ERC puede perder la mitad de su electorado; el PP se mantiene pero pasaría a ser la tercera fuerza al superar a ERC; ICV podría perder algún escaño y C’s ganarlo. Hasta aquí lo previsible.

Las dudas que hay que despejar el domingo son si los últimos esfuerzos de CiU le darán la mayoría absoluta y si Laporta llega finalmente al Parlament (algo que será más fácil cuanta menos gente acuda a las urnas, pues a menor participación más barato resulta pasar la barrera del 3% del voto). Lo que parece irreversible es que la diferencia de CiU con el PSC se agranda ahora –ya CiU ganó al PSC en el 2006– lo suficiente como para producir un cambio de Gobierno.

Dejo a otros análisis las especulaciones sobre los posteriores pactos, para centrarme aquí en las reflexiones que de esta campaña se pueden proyectar sobre la carrera electoral que continuará con los comicios locales y autonómicos de 2011 y con los generales de 2012.

En los próximos días asistiremos a interpretaciones que traten de buscar las causas de los resultados: que el electorado castiga al tripartito por su mala gestión; que el votante socialista se desencanta de su opción política (algo que podría amenazar con la pérdida en su día de importantes feudos como por ejemplo la alcaldía de Barcelona); que se está proyectando quizá un castigo al Gobierno central; que las aspiraciones independentistas de ERC se las lleva CiU; que el PP ha tocado techo en Cataluña, aunque su resultado le haga relevante para la gobernabilidad; que el discurso de C’s no pierde apoyo...

Pero hay un dato que sin duda alguna es relevante para los resultados del domingo, y además constituye un importante toque de atención para las campañas que están pendientes: los sondeos indican un incremento de la abstención de un 4% sobre el 2006, que ya fue la más alta desde 1995. Es decir, estaríamos en un 47% (algunas encuestas anuncian incluso el 50%). Resulta fácil encontrar justificación a esta elevada abstención en que el electorado socialista, cuando se desencanta de su opción, no cambia de partido sino que se queda en casa; o que el anuncio del progresivo crecimiento de CiU tranquilice a sus acomodados seguidores o desmotive a quienes ya lo dan todo por perdido.

Pero el índice de abstención se completa con otro dato que es también significativo: el voto en blanco (es decir, el de quien sí participa pero para expresar desacuerdo con todo) será el más alto de la Historia. Si en Cataluña las encuestas preelectorales del 2006 dieron al voto en blanco un 2% (predicción que se confirmó con un 2,03% finalmente en las elecciones), las encuestas de hoy auguran un 8%.

Los cálculos hablaban, entonces, de que la fuerza más votada sería, por delante del primer partido, la de quienes están desencantados o quieren expresar su disconformidad. No cabe duda de que en la población catalana hay malestar y disgusto. De hecho, los estudios que hace el Centre d’Estudis d’Opinió de la Generalitat de Catalunya muestran, por ejemplo, que la satisfacción de los catalanes con el funcionamiento de la democracia se ha invertido: si hace cinco años un 65% estaba muy o bastante satisfecho (y el resto poco o nada), hoy éste porcentaje es al revés. No parece entonces ser ésta la abstención del pasivo, sino la de un electorado cuyo enfado le hace capaz de acercarse a la urna para expresar su desacuerdo con cómo van las cosas.

¿Cuánto de este malestar puede estar provocado por la campaña electoral?

En comunicación política siempre es difícil establecer certeras relaciones causa-efecto. Se ha escrito y hablado durante la última semana sobre la frivolidad de la campaña, un juicio propiciado por los vídeos y videojuegos de carácter morboso, jocoso o sexual. Pero estas producciones, salidas de las filas de las juventudes de los partidos, no han contentado precisamente a la dirección de las respectivas formaciones; a mi juicio no se pueden tomar como representativas de las estrategias de campaña seguidas por las fuerzas en liza.

Más bien al contrario: la campaña catalana que ahora llega a su fin ha tratado temas sustantivos (empleo, energía, sanidad, industria, inmigración); cuestión importante ha sido la identitaria, pero el acierto de esto requiere un análisis más profundo, pues los datos al respecto son diversos. Los eslóganes y spots de televisión no merecen el reproche de la frivolidad (aunque quizá sí el de falta de innovación y creatividad, pero esto se debe a la precariedad que supone hacer una campaña con menos recursos). Se ha hecho también campaña en la red, con webs, blogs (y redes de blogs), videoblogs, agenda, telefonía móvil, presencia en canales y redes sociales (YouTube, Facebook, Twitter, etc.); cuál sea el efecto de esto en el voto es algo que tendrán que estudiar los especialistas, pero al menos se puede afirmar que ha habido un cierto esfuerzo por parte de los partidos por innovar y actualizar sus formatos de comunicación.

Uno de los problemas de la campaña catalana es que tenía que ser de perfil bajo. Así lo necesitaba CiU, pues para ganar es mejor no presumir de ganador y además los eventuales pactos y complicadas medidas que se reclaman para afrontar la crisis aconsejan mantener buenas relaciones con los rivales. Tampoco éstos han añadido agresividad y tensión. En general, esta campaña no ha seguido la estrategia de confrontación que sí hubo en 2006. Ahora bien, una campaña de perfil bajo sólo abre informativos y sale a portada cuando pasa algo como los vídeos mencionados.

Pero, a mi juicio, no se puede culpar a los vídeos del incremento de la abstención. Hay en ésta algo más de fondo, y a lo que tienen que atender partidos, medios y estrategas para lo que queda de carrera electoral. En las elecciones locales, en las autonómicas y generales se pueden reproducir estos índices de abstención y de voto en blanco.

Las del domingo serán las primeras elecciones en medio de una fuerte crisis económica. La crisis perjudica, primero, a los partidos de Gobiernos salientes. Condiciona los modos de hacer campaña, pues no se cuenta con tantos recursos como antes para distribuir indiscriminadamente el mensaje publicitario o los mítines. Será más necesario que nunca investigar inteligentemente para hacer campaña donde sea eficaz y tenga sentido. Será también necesario encontrar fórmulas más flexibles para dar acceso al ciudadano, pues a éste se le ha privado de un cara a cara en el que estaba interesado (a juzgar por los datos de audiencia del primer debate); y se le hurtará información interesante si se proyecta sobre las cadenas de televisión privadas la obligación de dar cobertura a cada partido en función de los votos que obtenga en las elecciones.

En tercer lugar, la crisis modifica las preocupaciones de los ciudadanos, que acudirán a las urnas –quienes lo hagan– con unas expectativas y demandas muy diferentes a las de 2006 (para el caso de las catalanas), 2007 (autonómicas y locales) y 2008 (generales).

Los datos publicados por el barómetro de reputación de ciudades de mercoCiudad siguen corroborando una realidad ya constatada hace un año: los ciudadanos no quieren la ciudad de los grandes espectáculos, sino la que les cuide y proteja en momentos de verdadera preocupación. La crisis, por tanto, modifica el estilo de campaña: los ciudadanos quieren propuestas y promesas realistas, que se atengan a la crudeza de la situación.

Queda todavía mucha carrera electoral y hay que ocuparse de los abstencionistas y de los blancos.